La Justicia británica, según Banksy
O sea, que en Inglaterra las reglas son las reglas, damas y caballeros; sin trampas, aunque no se conozca que se están vulnerando las reglas. No sé si conocerán la historia de Gail Trimble, la jovencita inglesa que se ha hecho famosísima en la televisión británica no por su cuerpo, no... sino por su mente. Pues resulta que esta chica, estudiante de Filosofía en la Universidad de Oxford, se ha ganado un puesto en la fama por contestar de forma correcta TODAS las preguntas en las que se animó a responder en el programa BBC to Quiz - University Challenge de la TV británica (que fueron las dos terceras partes de las que hicieron a su equipo).
Héroe para muchos, admirados de su sabiduría (contestó a preguntas dificilísimas antes de escuchar el fin del enunciado) que la consideran "una máquina y un fenómeno"; villana para otros porque consideran que es "sosa y engreída". Ella, que lo que parece ser es bastante tímida, considera que "si no fuera mujer, no habría estas críticas". A este respecto tengo que decir que no hay que escudarse en la condición genérica de cada uno, a nuestro cerebrito particular en España, Carlos Blanco, también se le considera así, y -aunque de verdad es bastante sosillo el chaval y con pinta de sabelotodo- es en general porque hay mucha gente que no soporta ver cómo otros tienen más cultura que ellos. O sea, que no le critican por ser lista y ser mujer, sino sólo por lo primero que no se gana por ser hombre o mujer sino que viene de serie.
Bueno, a lo que íbamos. Hablo de que las reglas son las reglas en el Reino Unido. Pues resulta que ahora se han dado cuenta de que un integrante de su equipo hizo trampas. Muy ligeras, una tontería y sin darse cuenta. Pero no cumplió las reglas. ¿Resultado? Pues su equipo ha perdido y ha ganado el segundo. Así de claro: dura lex, sed lex (y no hablo de una marca de vasos sino de una alocución latina que significa: "La ley es dura, pero es la ley").
Algo que no sé yo si en España se cumpliría a rajatabla y que demuestra que los ingleses ponen límites y los respetan, por dolorosos que sean (eso sí, entre ellos, que si los contrincantes son extranjeros bien que se saltan las reglas en su propio beneficio). En España permitiríamos una excepción, un poquito de aquí y otro de allá porque hay que ser bondadosos y, al final, los ladrones nos han robado la casa, hasta el dormitorio conyugal. Hay que poner límites y ser justos y estrictos; pero de eso los españoles sólo sabemos exagerar... y casi siempre librando al tramposo y fastidiando al indefenso. Es el síndrome del pícaro majete.
Lo dicho. Si siguiéramos las reglas y las aplicáramos... qué bien nos iría a los españoles. Eso sí, mi amigo El Charolito diría que "hay reglas para todo, incluso para romper las reglas". Es lo que tiene ser abogado.
Nota: la foto de arriba es de una estatua instalada en Clerkenwell Green (Reino Unido; ojo el enlace es de una noticia en inglés) por el artista Banksy, que me encanta y del que hablaré aquí en otra ocasión. Es una alegoría de la Justicia inglesa, con la falda "arremangá", botas de caña alta y liga. Evidentemente Gail Trimble es la chica que sale en el vídeo de aquí arriba (también en inglés, pero que da una idea de la velocidad a la que contestaba las preguntas).
2 comentarios:
En uno de mis viajes a Londres, hace unos años, estuve en Clerkenwell para poder conocer un hotel súper cool. Ya el barrio estaba despegando, zona de creadores, de innovación... ¡¡¡pero no vi esa escultura tan divina!!! La Justicia con... coño, ¿dónde le ves tú el liguero? bueno, ¡con esas botas tan cañeras y ensñando las bragas! Me encanta... Cuando vuelva tengo que ir a buscarla para hacerme una foto con ella.
Pues eso mismo iba a decir yo jajaj que en cuanto regrese a Londres me voy a buscar la estatua, que me encanta. Besitos varios.
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